Real Academia Nacional de Medicina
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Sesión del día 27 de Marzo del 2001 - Comentarios en torno a la Medicina que viene

"Comentarios en torno a la Medicina que viene"

 

Domingo Espinós Pérez

 

 

 

 

por el Excmo. Sr. D. Domingo Espinós Pérez,

Catedrático de Patología y Clínica Médicas
Universidad Complutense de Madrid

Académico de Número
Real Academia Nacional de Medicina

Sillón nº 37-Medicina Interna-

 

RESUMEN

La Medicina del siglo que empieza tendrá un gran desarrollo científico y tecnológico. Corremos el riesgo de que la tecnología se interponga entre el médico y el enfermo, poniendo en peligro la esencia de la relación médico-enfermo.

Esta medicina tecnológica estará favorecida por la actitud de la sociedad. Esta ya no ve, no verá, ni verá, al médico como hace unos años, ya que éste será considerado simplemente como un dispensador de salud, como el abogado un dispensador de leyes y normas.

Junto a los avances técnicos, véase como ejemplo, los que encierra un departamento moderno de Diagnóstico por Imagen, están los de la moderna Biología Molecular y la Genética.

Será posible elaborar mapas epidemiológicos basados en datos genéticos, lo que permitirá aplicar terapias preventivas en fases muy precoces.

Como contrapartida será posible, ya lo está siendo, predecir en cierta medida el futuro de un hombre, incluidas sus aptitudes laborables.

La Farmacogenética se presenta con unas posibilidades casi ilimitables. La búsqueda de fármacos muy selectivos, orientados frente a una proteína "diana" será una realidad. Los ensayos clínicos tendrán en cuenta las diferencias individuales y étnicas.

La terapia génica llegará a ser una realidad. Los trasplantes de órganos, de células y la colocación de prótesis tendrán un gran impulso.

No debemos olvidar que la Medicina que viene será cada vez más cara. Mientras los profesionales médicos y el público estemos informados de todos los avances médicos no hay soluciones que eviten el gasto sanitario. La Sociedad debe conocer esta realidad y, al mismo tiempo, aceptarla.

El médico se verá acosado por múltiples protocolos y por las conclusiones de la "Medicina basada en la evidencia", que si indudablemente encierran ventajas pueden hacer tambalear el criterio médico individual.

El precio del progreso no debe ser la creación de un peligroso medio ambiental. La medicina preventiva orientada, por un lado, a controlar y mejorar el medio ambiente y, por otro lado, orientada a mejorar el "estilo de vida" tiene, y tendrá un quehacer incalculable.

Será necesario desarrollar y apoyarse sobre una correcta bioética humanitaria. El hombre del siglo XXI se siente con un poder casi infinito y puede hasta decidir quien debe nacer, la manera de nacer y el tiempo o modo de morir.

Mal andará la humanidad si está dispuesta a romper las normas y principios naturales que rigen nuestro ciclo biológico, poniendo en peligro la identidad y la individualidad del genoma.

Considero que es peligroso adoptar excesivas medidas de control del gasto sanitario si esto limita la actividad del médico, llegando incluso a cuantificar, en términos económicos, el tiempo destinado al "acto médico".